Mala baba

Ayer en el segundo cara a cara de la campaña electoral el Rajoy volvió a superarse, tonterías, bobadas, y mentiras aparte, a mí me hizo sumar asombro a la vergüenza ajena y vena violenta que siempre me produce. Primero comenzó con sus típicos y exagerados seseossss (que cada día dice más palabrasss acabadasss en essse, y más mentirasss), a eso ya estaba acostumbrado, pero empezó a abrir la boca de vez en cuando, y parece que...¡ joder, esa lengua no le cabe en la boca ! ¡ si se va a atragantar ! ahora sabemos por qué no puede tener la boca cerrada.

Continuó con el espectáculo, y vaya movimiento de ojos, se iban hacia todos lados, vaya repertorio de tics. Me recordó a un antiguo compañero del colegio, tenía los mismos tics al hablar, que era acomplejado, tremendamente inseguro y que nos hizo presenciar algún momento de desequilibrio, y que mentía continuamente para agradar a los demás (os juro que me lo recordó muchísimo).

Pero cuando yo pensaba que el momento cumbre había sido el felipondio disparado por su adversario el señor Zapatero, cual misil antiaéreo llegó el momento cumbre: mis ojos parecen ver algo en los labios de Mariano, pero yo dudo, pienso que no puede ser, que será cosa de la pantalla de la tele, que cada día veo peor peor peor, pero sí, es lo que me pareció desde el principio. En sus labios hay un hilo del grosor del cable de un cargador para la batería del móvil, de color blanco, ¿ha pasado por allí spiderman o tal vez se le ha quedado un resto de mayonesa de la cena?, no, la gigantesca lengua de Mariano produce demasiada ''baba'' para poder retenerla toda sin sacar un pañuelo del bolsillo.

Esta noche la baba de Rajoy va a ser más vista en la televisión que los partidos de la Champions.