sábado, 26 de mayo de 2007

Desencantador diseño

Desencantado es cómo estoy por muchas cosas, pero hay una que a parte de desencantado me tiene cabreadete, y la gente que forma parte de ello influye bastante. Ya me había acostumbrado al desencanto que produjo en mí en la Escuela de Artes, yo con toda mi ilusión, con mis ganas de compartir un poquito de talento, y ahí estaban ellos, con sus obras, sus genialidades, sus modernidades, sus ''oh, qué interesante soy...'', y yo así no quería ser, vamos, ni parecido, pero bueno, tendré que acabar lo que empecé por una vez en mi vida, echarle huevos al toro e ir a mi bola.
Con tal tema encajado e intentando no mirar mucho a tantos artistas me topo con una especie de la que algo conocía, pero como el que conoce a los tiburones por los documentales de la 2 vamos. Esta especie es rara, se alimenta de la crítica destructiva sobre los principiantes de manera cruel y poco sutil, su obra siempre es buena, ellos saben, entienden, y lo tuyo siempre tiene algo mal, algo que se puede mejorar, son perfeccionistas, y sobre todo son ''gente guay'', son ''cool'', son ''oh, son semidioses''. Anda no me jodas, que hace falta ser pedante macho.
Un compañero que tiene la intención de estudiar los estudios superiores de diseño me dijo hace poco: ''no me dejes volverme así eh, tú dame una hostia si acaso...'', y es que encima algunos no fueron así siempre, se convirtieron.
Menuda manera de desilusionar gastan los figuras, los guays, los... igual tienen miedo de que la futura competencia sea mejor. Porque dudo que a ellos los trataran así, flipando de manera increíble, sabiendo de todo, y recordándote que lo tuyo siempre es una mierda.

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