El showman del mostacho

Parece ser que se aburre el señor ex-presidente, y es que ahora no pasa una semana sin que salga Josema por la televisión dando su opinión de la actualidad española. Con aires de interesante y con su nueva melena peinada por la ralla a un lado se dedica a opinar, pero desde la trinchera claro, ahora que no se sabe qué es (a parte de un prejubilado, neofranquista, soberbio y mentecato) y que no recae sobre él ninguna culpa, ahora que le da igual mojarse que no.

Josemari aparece frente a las cámaras de televisión levantando una ceja y parlando como un loro, mejor dicho, como una marioneta de José Luis Moreno, que tiene parálisis en el labio superior. Cada día más feo y más viejo, como si no hubiéramos tenido suficiente con sus años de gobierno FASCISTA jodiéndonos en cuanto tenían la ocasión, pues vamos a tener que seguir tragando con él hasta la muerte y más allá, porque las malolientes cadenas privadas le dedicarán programas especiales y ridiculeces por el estilo.

Luego el tío empieza a intercambiar piropos en medio de un discurso con su señora, y el gentío franco-analfabeto le ríe la gracia, porque es un tío con chispa. No debemos olvidar sus golpes de humor, metiendo una pluma en el escote de una reportera, ni muchísimo menos otros fantásticos episodios como su récord de velocidad corriendo por las mañanas, digno de un superhéroe, o sus magistrales lecciones de cómo hablar español con acento tejano. Vamos, que el tío está a la altura de Carmen de Mairena, Paco Porras y esta peña.

Vete ya hombre, y deja de joder la marrana a los que no soportamos tu ineptitud.